Lo sabemos,
no es algo nuevo, estamos juntos
y sin embargo,
es momento de partir;
Nos damos la mano, ruego porque te quedes,
pero volteas
y yo tengo que seguir mi camino mientras la incertidumbre golpea mi rostro,
Comenzamos a andar en dirección opuesta,
en los primeros pasos voy recordando tu cara joven, tus ojos danzantes, tu cabello alborotado y esa boca hecha a mi medida,
más pasos,
el frío comienza y tengo tanto miedo de voltear hacia el pasado,
es que ya sólo recuerdo las ojeras de tu cara, tus ojos cansados, el cabello sucio y tu boca seca,
a cada paso que doy, te vez más lejano,
pareces una sombra perdida
y sabes:
Me he cansado de girar la cabeza, porque ya no te distingo, si tu cara, tus ojos, tu cabello o esa boca, habrán sido como las de aquel, ese que se acerca, me saluda, sonríe, que labios cuando me besa, ya no respiro, pero sigo más viva que cuando comencé a tu lado.
Hermoso relato Luzzy.
ResponderEliminarEs un placer leerte y saludarte.
Besos