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De forma metafórica, comenzaron a caer los últimos copos de nieve, mientras, en una esquina del cielo el sol buscaba penetrar de nuevo, pero no fue suficiente, hoy, quería invocar a la inspiración y tratar de escribir, pero mis letras se han desvanecido con el frió de una tormenta creada por ráfagas de tristeza, que ha regresado, aunque trate de cubrirme con los mejores abrigos.

El tiempo tampoco parece ser mi amigo ya, con la entrada a los salones del conocimiento se ha reducido a polvo, buscare un reloj de arena para organizarlo todo, pero mientras tanto, la nostalgia ha vuelto a quemar mis entrañas dejando entre sus cenizas a unas lágrimas olvidadas que en lugar de apagar el fuego, han hecho más penetrante el calor de la hoguera.